El problema
concreto que se plantea es el de la plantación de un árbol por un
vecino, en su jardín, que afecta a las luces y vistas de las que goza la
vivienda superior, lo que plantea varias cuestiones, pero en esencia pueden
reducirse a la regulación que es aplicable de dicho supuesto, y a la
legitimación para ejercitar las acciones a que en su caso haya lugar.